San Diego, California, fue la ciudad que presenció la gran final de la Copa Oro femenino, allí Estados Unidos, las locales, cuatro veces campeonas mundiales, pusieron un broche de oro a su irregular torneo con este trabajado triunfo ante Brasil, ganadora de la última Copa América, que llegaba motivada a esta final con un total de cinco victorias.
El triunfo fue 1-0 con gol de su capitana Lindsey Horan, tremendo cabezazo sobre el final del primer tiempo. Con ese resultado se coronó como la primera selección campeona de este torneo entre selecciones de Concacaf y Conmebol
El torneo sirvió como preparación de los próximos Juegos de París.
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